Bueno, primero que nada quiero felicitar al Club por el exitoso torneo que se realizó el fin de semana pasado. Sin duda alguna superó todas mis expectativas, no sólo por los 87 inscriptos (nuevo récord), sino también por la excelente organización y seriedad del mismo.
Los que hemos jugado torneos en vivo sabemos muy bien lo que cuesta encontrar un torneo hecho a medida para el jugador de poker. Un torneo que cuente con una estructura de luces adecuada para poder jugar y no uno de esos torneos súper turbo que encontramos por la vuelta, donde llega un momento en el que se vuelve tan aleatorio como ir a la ruleta. A mi entender, hoy en día en nuestro país, el único torneo que cuenta con estas características (sacando el LAPT de Punta del Este) es el del Club Uruguayo de Poker. Es triste que en nuestro país, teniendo tantos casinos (y tan lindos), no se puedan armar torneos que contemplen las exigencias BÁSICAS del jugador de poker.
En lo que refiere a mi actuación en el torneo, pasé sin pena ni gloria, terminando a mitad de tabla (45 de 87). Pero no me quejo, me divertí mucho. Robos de luces frustrados me llevaron a perder muchas fichas y, las pocas veces que tuve manos relativamente buenas, la acción en la mesa resultó ser muy fuerte con subidas y re subidas. Terminé el torneo cuando mandé todas las fichas al medio con 98s y un rival a mi izquierda pagó con AJ. A esa altura tenía unas 4.5BB y necesitaba hacer un movimiento rápido si quería seguir con vida, así que decidí que eran cartas suficientes como para ir con todo. Lamentablemente la mesa no trajo nada para mí y quedé afuera del torneo.
A pesar de no haber ganado nada fue muy divertido jugar con amigos de la facultad, con amigos del poker, con amigos de amigos; hablar sobre los “bad beats y lucky draws” que recibimos a diario en internet, sobre las metas que tenemos para este año y arreglar para juntarnos a jugar algún que otro día.
Otra cosa no menos importante que me gustaría resaltar es el buen nivel, a mi entender, de los jugadores del torneo. En abril de este año tuve la oportunidad de viajar a Las Vegas con mi hermano y jugamos alrededor de unos 15 torneos, con buy-ins que iban desde los US$75 hasta los US$500. El nivel que había en estos torneos era realmente muy inferior al de los torneos del Club. Podías ver todo tipo de errores: personas que pagaban la mitad de su pila de fichas para buscar la escalera al “hueco”, gente preguntando si el color le gana al full, etc. En las salas de los casinos de acá también podemos ver este tipo de cosas bastante llamativas. Creo que no es casualidad el buen nivel de los jugadores del Club, sino más bien una causalidad. Buenos jugadores de poker que buscan buenos torneos. Así de simple.
En cuanto a mis planes en Internet, se viene la WCOOP (World Championship Of Online Poker) en Pokerstars a partir del 5 de Setiembre con bolsas millonarias. Esperemos que el buen juego y la suerte nos acompañen un poco y poder dar un buen batacazo. Me tengo fe.
Vuelvo a felicitar a los organizadores del torneo, en especial a Andrés Sanguinetti, que hacen posible que tengamos torneos serios, competitivos y sobre todo accesibles para la mayoría de los jugadores.