Buenas y santas para todos. Se fue mayo para siempre, pero por lo menos vino junio. Salió el bono bonito y levanté la banca. Como venía ganando bien y pisando firme, ya que estaba, levanté el nivel a NL100. Es más, hasta por unos dias levanté los brazos festejando los botes grandes.
Sin embargo, no pasó mucho tiempo hasta que me levanté de la silla habiendo perdido mucha money. Reversa nuevita y reculé de inmediato a NL50; a seguir perdiendo. Malogré mucho camino que había adelantado y retrocedí varios casilleros con respecto a mi banca. En parte por una mala racha y en parte por la presión que me puse a mi mismo al intentar afianzarme en NL100. Ya tengo más que sabido que estas cosas no se pueden apurar y que cada uno debe cumplir sus ciclos, a veces más largos, a veces más cortos. Para que tengan referencia y sepan cuánto es un duro golpe para mí, fueron poco menos de USD 1.000 en 3 días los que se fueron. Si no van a decir que solo cuento las ganadas.
Espero igualmente que sólo se hayan ido para bucar amiguitos y volver a casa siendo multitud. Lamentablemente todo mi entorno sigue siendo de lo más inestable, y eso no me ayuda a desarrollar mi mejor juego. No sé cuánto tiempo durará esta situación y ni sé qué va a venir después, pero igual creo que falta un buen rato antes de que me vean abandonar.
Estuve, como muchos de nuestros lectores, en el torneo del CUdeP de Punta del Este. Lamentablemente sin sumar, aunque esta vez no debido a un bad beat, sino a que recibí muy pocas cartas decentes y no encontré las oportunidades para juntar fichas. Por lo menos salí segundo en el PL Omaha que se jugó después, que terminó a las 7:30am; MUY fisurados. El torneo principal fue muy interesante y la organización sigue mejorando. Para la próxima parece que ya está asegurado el doble de cantidad de sandwiches, incluyendo olímpicos, para el segundo entretiempo.
Volviendo al cash para este mes, no tengo demasiadas metas planteadas. La única que mantego, por ahora, es ganar una promoción de la sala donde estoy aún, que consiste en ser el más perseverante. Empezó el 1º de febrero de este año. Dada la categoría de nivel vip en la que me encontraba, estaba en competencia por USD 500, que van al que haga como mínimo 250 puntos por día, por el mayor tiempo. Empezamos siendo miles, luego cientos, al poco tiempo decenas. Hoy por hoy sólo somos 2. Un ucraniano y yo. Sin duda ha probado ser perseverante, pero ya lo dijo Jim Carrey en La Máscara: “Eres bueno, muy bueno, pero mientras esté yo, siempre serás segundo”. Así que seguiré jugando todos los días hasta ganarlo.
Obviamente este mes no habrá demasiado tiempo para jugar, ya que está el mundial y es cita obligada para los que les gusta el fútbol de selecciones. Me conformo entonces con mantener los puntos y sumar un poco, pudiendo ver todos los partidos.
No pude cumplir con el tema de la gráfica de mis manos este mes, ya que no he tenido oportunidad de ir hasta La Paloma a buscar mi otra computadora. De todas formas este próximo fin de semana voy, así que es probable que se las muestre en la próxima, por lamentable que sea.
Una cosa que puedo agregar sobre las malas rachas es que es muy importante tener a la gente correcta alrededor cuando estas se presentan. Por suerte ese es mi caso. Que alguien te diga que te tiene fe y que cree que podés superarlo no te devuelve la plata perdida, pero te levanta la moral y alegra el espíritu para poder volver a la cancha con la frente en alto y con ganas de ganar, más que ganas de no perder. Más importante aún cuando son jugadores que vienen jugando bien, y mejorando constantemente (gracias Gonza).
Espero que el “badbeatazo” de ayer en el torneo online del CUdeP en Full Tilt haya sido solo la cereza de la torta. Nada que no hayan visto antes, pero igual se los cuento.
Recibo la codiciada AA en posición media y abro-subo como corresponde, llevando la apuesta a 250 fichas con ciegas 40/80. Sólo recibo un call del SB, cayendo acto seguido el “floc” galáctico JJA rainbow (distintos palos). Dije: ”¡Oh rayos! ¡Qué floc!”. Claro que nadie me escucho porque el torneo era online. SB pasa y me toca a mí; mmmm, mmmm, paso. Apostar era una opción totalmente válida a mi parecer, algo así como una CB de medio bote, ya que había subido preflop.Pero ahí sentí que sólo me pagarían con un A o la J, así que hubiera sido para correr muchas manos con las que él pudo hacer ese call/check, que tenían chances de mejorar en el turn.
El turn hizo lo mínimo que pudo hacer, o sea repetir un color y poner dos corazones (creo que el 6 de corazones fue), y enfrento un nuevo “paso” de SB. Acá ya no tiene sentido pasar. Algo hay que tirar por el bien del pozo, por lo menos ahora aparte del A y la J, también pagan los corazones, si la apuesta es mediana. Medio bote que fue insta call por SB. Y llegó el franchute, “rivery”, con la hermosa J, para un board JJA6J. Y empezó el tiroteo. SB apuesta. Ahí dije: ”¡Oh rayos! ¡Qué rivery!” Pero, ¿qué puede llevar? Yo le subí y me resubió nuevamente. El frío recorre mi espalda presintiendo lo peor, pero hacer el call me deja bastante corto de fichas. ¿Foldear? Pahhh, si no me muestra la J es difícil foldear, ya que hay tantas chances de que tenga la J como el otro A, y podría haber jugado parecido en cualquiera de los dos casos. Con el insta call a mi All-In muestra QJ off para poker, arrastrando todas mis “chafis”. 1 out. Así es la vida.
Abrazo para todos y los vemos a la vuelta. ¡¡¡Arriba la celeste!!!